sábado, 22 de marzo de 2008

Paraiso en vida: Zipolite, Oaxaca

Natural, tranquilo, agradable, y bello, son ésas las palabras con las que cinco personas, dos mexicanas y tres francesas, califican a Zipolite. La única playa nudista en Oaxaca, y de las pocas que existen en la República Méxicana.



A seis horas de la Ciudad de Oaxaca, te encuentras con una vereda semiárida. Cerros comienzan a perder lo que atrás se llamó avenida. De repente no se ve nada más que árboles, algunos de mangos, otros son platanares. Te sientes perdido cuando de repente, una hora después, se siente un humedo calor.

El clíma sufre una transformación que excita, empero también fastidia. Sólo basta esperar el "ya llegamos" del señor que maneja la camioneta tipo fletera que transporta a quienes no tenemos auto. Sí, ¡se ve la playa!, pero aún no se detiene el medio de transporte. Tiene que transcurrir casi un cuarto de hora más para que se detenga la enlonada camioneta llena ya de polvo junto con nuestros pulmones.
Se para enfrente el chofer, como si animos tuvieramos de echarnos a correr. Con su jícara recoge los diez pesos que son de tarifa.




El calor comienza a deshacer. Nos introducimos en la pequeña vereda de menos de veinte locales, que son el único centro donde converge el comercio de Zipolite.



Son las nueve de la mañana, llegas a la playa y no hay más que una inmensa tranquilidad, armonía y pasiva intensidad de las olas del mar. Éstas, acompañadas de cientos de casas de acampar, botellas que van desde cerveza, vino barato, posillos quemados por tanta marihuana, y dos que tres personas ya caminando a las orilas de la playa.

La parranda en Zipolite se denota muy llena de alegría. Así como está definida en la red. Drogas, alcohol, sexo, música, y gente llena de vida, son la esencia de la semivirgen playa oaxaqueña.

El día comienza a transcurrir, y el medio de éste llega. Más gente se junta a las orillas del mar. Jóvenes jugando, señores acostados, ya sea tomando el sol, o bien leyendo. No existen los tabúes. Niños ofreciendo todo tipo de drogas sin discreción alguna. Mujeres y hombres desnudos. No hay provocaciones ni morbo. Jorge, mexicano de 36 años, señala que desde su punto de vista nadie va a ver a la gente desnuda.

Pocos son los hoteles, y muchas las casas de campaña. Tal parece que los mexicanos tenemos más que los extranjeros. Jorge y "anónimo" de 30 años, igual mexicano, aluden a que están hospedados en alguno de los hoteles de la región.
En Zipolite la vida es cara para quien quiere la vida cómoda. Restaurantes caros y hoteles en la misma dirección. Ambos ya van más de tres veces que visitan el pueblo.





En contraste: Benjamine, Sebastián y Tom, franceses de 27, 21 y 29 años respectivamente, aluden a que están en Zipolite por su tranquilidad, a excepción de Benjamine que va a visitar a su hermano que se casó y vive ahí. Sebastián, y su amigo Tom es la primera vez que van a esa playa. "Para nada, yo no me quedo en hoteles, tengo mi hamaca. Es más rico y además menos caro", comenta Sebastián.

La vida en Zipolite es armoniosa, llena de paz. Nadie molesta a nadie. Jorge, "anónimo", Benjamine, Sebastián y Tom, tienen diferencias en sus formas de estancia. No obstante, los cinco convergen en que no debería haber más difusión para la atracción de turísmo. "El día que venga más gente yo me voy", afirma Sebastián.

Con la monotonía más esperada y menos estresante del mundo, comienza a caer la tarde. La gente no deja de disfrutar desnuda como Sebastián, y "anónimo"; o bien simplemente con su traje de baño como Jorge y Tom, los últimos rayos de sol.

Las antorchas de botes de lata que están encima de las piedras son encendidas. El baile está dando inicio.La vida agobiante continúa en todos lados menos en Zipolite.

Natural, dice Tom. Paisaje, señala Jorge. Chida, menciona Sebastián. Es ésa la definición para Zipolite y en sí, para todo aquel que quiera concer el paraíso en vida.




2 comentarios:

claudia santana dijo...

Supongo; por la redacción que realizaste de Zipolite es una crónica no?¿ o al menos es lo que interprete por como cuentas adetalle de las olas, cosas y personas que estan en el lugar; me agrado y algun dia lo visitare.

Anónimo dijo...

hola soy de huajuapan de leon oaxaca y vicito zipolite cada año y conparto con ustedes la misma opinion zipolite es un paraizo hermosoyo prctico el nudismo ojala y suban fotos ok felicicadez y viciten zipolite......